Es uno de los muebles más importantes del hogar, protagonista indiscutible del salón. A la hora de elegirlo, tendremos en cuenta su comodidad; pero también su estilo, su forma y su tamaño, para que vaya en consonancia con la decoración de nuestra casa y el espacio disponible.
El tejido, los colores, el tipo de asiento y de respaldo, la estructura, su capacidad de almacenaje… ¿Cuánto espacio disponible tenemos? ¿Cuántos somos en casa? ¿Cómo está decorado el salón? ¿Qué uso le vamos a dar? Hay muchos detalles en los que fijarnos para la elección de un sofá.
En Muebles Fhoa disponemos de un amplio catálogo de sofás en Asturias para adaptarnos a distintas preferencias, combinando comodidad y versatilidad. El abanico de materiales, colores, estilos y otras características (como respaldos reclinables o asientos deslizantes) es tan extenso que lo mejor es que pases por nuestra tienda para que nuestro equipo de interiorismo te asesore según tu estilo de vida.
A continuación te presentamos un resumen de los tipos de sofá en cuanto a su estructura, pues es un aspecto importante según la ubicación que le vayamos a dar y la distribución con respecto al resto de los muebles.
Sofá en línea
Un clásico, un básico. El número de plazas determina la longitud total del mueble, pero, por lo general, el sofá en línea suele ser indicado para viviendas de dimensiones reducidas y familias pequeñas.
Una opción muy recurrente para espacios pequeños por su diseño compacto.
Sofá con chaise longue
Este modelo lleva años ganando terreno en las viviendas modernas. Es un sofá con una prolongación para estirar por completo las piernas y estar prácticamente tumbados en él. El chaise longe puede ser individual o un asiento auxiliar de otro sofá. La sensación visual es acogedora.
Es una opción recomendable para salones rectangulares y estrechos.
Sofá rinconero
Sin duda, este es un tipo de sofá muy adecuado para familias numerosas, por la cantidad de asientos que ofrece. Permite un máximo aprovechamiento del espacio, pues se adapta perfectamente a las esquinas.
Son voluminosos y por ello pudiera parecer que es necesario un salón muy grande para colocarlo; pero pueden servir para sacar el máximo partido de un cuarto pequeño.
Sofás modulares
Llamamos sofás modulares a aquellos divididos en piezas que se pueden poner y quitar según gustos y necesidades. Los módulos —que pueden ser, a su vez, de distintos tipos: con o sin respaldo, con o sin brazos, etc.— nos permiten aumentar o disminuir el tamaño del sofá cuando haga falta. Son los más versátiles, porque facilitan ampliar o reducir el número de asientos; las piezas se colocan unas junto a otras con elementos de sujeción fáciles de manipular.
Ideales para estancias irregulares, con una distribución compleja, o salones pequeños.
Sofá cama
El sofá multifunción, asiento por el día y cama por la noche.
Resulta perfecto no solo para alojar a alguien de manera ocasional, sino también para su uso diario en casas pequeñas en las que se necesite una habitación extra, pues los distintos sistemas de apertura son cómodos y prácticos.
Sofá tipo Chester
Es un sofá inglés, originario del siglo XIX y muy característico por sus brazos en forma de voluta, sus patas cortas y torneadas, y su respaldo acolchado con tapizado en capitoné. Era un símbolo de lujo y prestigio de los clubes londinenses.
Hoy son habituales en decoraciones de estilo clásico y vintage.
Sillones y pufs
Sofás de una plaza que pueden tanto para añadir un asiento extra como para complementar el estilo de nuestra estancia.
Son fáciles de ubicar por su tamaño reducido. Los pufs, generalmente sin respaldo, sirven para apoyar y reposar los pies o para sentarse, y por su forma pueden adaptarse sin problemas a espacios.
¿Tienes claro ya qué tipo de sofá es el que mejor encaja en tu salón? Si te quedan dudas, no te preocupes, ven a vernos y nuestro equipo de interiorismo te aconsejará personalmente.